Pirata 1ra PARTE

Pirata

Un verdadero capitán nunca soltara su espada, por más que las heridas de su cuerpo y alma duelan.

“Ahora soy un relato olvidado, del cual nadie te podra salvar.”

 [Una mujer no puede ser nunca un pirata. Se equivocaron ya que muchas lo lograron, pero una destaco entre las demás aunque hoy este perdida en la historia.

Nadie sabe su nombre, ni a qué edad se convirtió en la capitana de la tripulación más sádica de los siete mares, a excepción de unas pocas personas las cuales son sangre de los únicos sobrevivientes de su tripulación la cual tuvo un triste y doloroso final.]

Fecha y lugar desconocidos, eran los tiempos más difíciles que había tenido un pequeño pueblo a orillas del mar, por culpa de los piratas, la paz dejo de existir, todo era un caos. Autoridades del pueblo empezaron a entrenar a jóvenes para intentar reducir la presencia de aquellos piratas en sus puertos, ahí fue donde la historia de “pirata” empezó.

Ella era una jovencita que aparentaba tener de 15-17 años, nunca hablaba con cualquier persona, a excepción de su tutor quien también fue su maestro, él había empezado a  prepararla para cualquier circunstancia, veía en ella a una guerrera.

Al no ser muy sociable, nadie conocía su nombre por más que  le preguntaran ella solo les respondía con una falsa sonrisa la cual daba miedo, tenía unos compañeros a los cuales veía como a sus hermanos.

Ella había perdido a sus padres en un incendio del cual solo ella sobrevivió, pero cree que su hermano mayor está vivo, ya que cuando sus vecinos apagaron el incendio y buscaron los cuerpos solo encontraron a los de sus padres, pero ni un rastro de su hermano. Las autoridades pensaban que el causo el incendio y escapo, ella no lo creía, desde aquel día fue que ya no volvió a decir su nombre a nadie, una razón era que las autoridades del pueblo la veían como una asesina, cómplice de su hermano, también era que si su hermano era culpable y la quería muerta sería mejor estar oculta entre la multitud mientras lo buscaba. Durante ese tiempo empezó a entrenar ya sea en combate cuerpo a cuerpo, manejo de armas, (espadas, dagas, armas de fuego de aquellos tiempos, etc.).

Así se formó como una gran guerrera gracias a su maestro y compañeros, hasta que un día mientras estaban en el puerto un gran navío pirata completamente negro arribo ahí, el capitán de aquel gran bajel hablo con una gruesa voz. “He escuchado que en este puerto se nos prohíbe la entrada, y que también que muchos de ustedes saben luchar y eso me moleta. Yo y mis hombres acabaremos con este lugar y nos llevaremos lo que queramos, a no ser que sus  mejores guerreros se unan a nosotros, si lo hacen nosotros y ningún otro navío pirata volverá por este lugar.

Pero no cualquiera subirá a mi barco será una combate, pero no a muerte de uno a uno ustedes contra mis hombres, si caen con heridas de gravedad perderán y si derivan a mis hombres de la misma manera ganaran y  formaran parte de mi tripulación.”

Tal y como dijo aquel capitán empezó un combate mortal, varios empezaron a luchar y muy pocos eran elegidos incluso los compañeros de “ella” fueron elegidos hasta que llego su turno. Todos empezaron a burlarse y a decirle cosas como “tu solo eres una mujer, no podrás contra un hombre, largo eres inútil contra un hombre, eres solo un niña, las mujeres no son guerreras, estas muerta, etc.”

Ella hizo como si no escuchara hasta que el capitán de aquel barco volvió a hablar. “empiecen la pelea, no tenemos toda la tarde” la gente se sorprendió acaso a ese hombre no le importaba que una mujer  valla a luchar contra uno de sus hombres o sabía que aquel combate ya lo tenía ganado su marinero.

Ella tomo una de sus dos espadas y empezó el combate, tenía mucha agilidad y fue el combate más  corto de los que se dieron, ella gano muy rápido, sin mucho esfuerzo, la gente dejo de burlarse y la miraban con mucho asombro.

“Es mi turno, por fin un combatiente digno” volvió a hablar el capitán.

Ahora si las personas que estaban presenciando los combates empezaron a temer por la vida de la chica, todos sabían que cualquier capitán pirata es reconocido por ser el mejor y más sádico combatiente.

El capitán pirata se paró en frente de ella y le susurró al oído, “Tú no eres una flor delicada, sino una rosa con muchas espinas, bella pero intocable y fuerte” ninguno de los presente escuchó lo que le dijo, después de eso empezó el combate, no solo fue con armas si no también cuerpo a cuerpo, fue muy duro para ella, estaba herida, pero no era grave, no se rendía y aquel capitán está feliz de tener un combate con alguien que no se rinde tan fácil, fue un combate muy largo y ella logró que el capitán caiga con mucho esfuerzo a aquel capitán, todo el pueblo y los miembros de la tripulación de aquel bajel negro se asombraron, nadie se imaginó que una mujer pudiera vencer a un hombre, en especial a un capitán pirata.

Con mucha dificultad aquel señor se levantó del suelo con ayuda de un par de sus hombres y se acercó a ella y dijo “He sido vencido y no me avergüenzo ya que fui vencido por un rival digno, por lo tanto eres bienvenida en mi tripulación, desde ahora todos te conocerán como PIRATA y serás la segunda al mando en mi tripulación”

Ningún presente dijo nada todos estaban asombrados, una mujer recibiendo un título muy importante ser llamado pirata es algo que no cualquiera puede obtener, pero aquella chica lo obtuvo.

Desde entonces a ella solo la conocían como PIRATA, para la tripulación ya no importaba su verdadero nombre, pero como era una ley para ellos tuvo que decirles cuál era su verdadero nombre, pero solo se quedó entre ellos al igual que el nombre los demás.

Pirata era admirada por muchos, pero también era odiada, envidiada, ya que convenció a su capitán de formar lazos de paz con los puertos, se podría decir que ellos ya no se dedicaban a saquear a los pequeños pueblos que se asentaban a las orillas  de los mares si no que los defendían de otros piratas y también se dedicaron a atacar a los barcos de gobernantes o dictadores de aquellos tiempos para dar una parte de su botín a los necesitados y otra para su tripulación, eran “hombres” sádicos pero a la vez eran buenas personas.

Pero no todo termina ahí, semanas después de que Pirata se uniera a la tripulación fueron azotados por una fuerte epidemia en su barco después de una lucha contra un bajel enemigo, pocos eran inmunes a la peste y se fueron a una parte desconocida de los siete mares para evitar que aquella peste llegue hacia otros lugares, gran parte de la tripulación fue afectada entre ellos el capitán, los pocos que resultaron tener una inmunidad natural se dedicaron a cuidar a los enfermos.

Pirata se encargó del capitán ya que él se lo había pedido para poder contarle todo lo que necesitaría para poder dirigir a la tripulación mientras él se encontrara en ese estado deplorable.

Pasó un largo tiempo y más de la mitad de los enfermos habían muerto, aquella peste resultó  peor de lo que esperaban, pero apenas dos tripulantes habían mejorado, y su capitán estaba en sus últimos momentos, la enfermedad lo estaba matando, todos sabían lo que pasaría y sería muy pronto, Pirata hacía lo posible para que su capitán soportara, pero él se dio por vencido y pidió que lo ayudarán a ponerse de pie para subir a cubierta y dirigirse por última vez a su tripulación.

Al estar en cubierta llamó a todos sus “hombres” y dijo con voz firme: “Estoy orgulloso de todos ustedes, sé que hemos sufrido con esta peste, pero también hemos pasado situaciones peores, somos fuertes, se que mi fin está cerca y desde ahora declaro a Pirata como su nueva capitana,” toda la tripulación alzó su voz en coro “Juramos eterna lealtad a nuestra nueva capitana, lucharemos y moriremos a su lado.”